Encontrar el equilibrio emocional, físico y mental no es fácil en la sociedad competitiva en la que vivimos. Estas exigencias nos pueden causar un gran desgaste psicológico. Pasamos los días acelerados, centrándonos en él "hacer" y olvidándonos por completo de nosotros. Siempre estamos pendientes de lo que se espera de nosotros y eso nos perjudica gravemente. Es importante tomar consciencia de ello para no caer en esa inercia, porque cuando eso ocurre se produce el desequilibrio, ya sea a nivel mental, emocional o físico que nos lleva al sufrimiento.
A veces nos sentimos cansadxs, apáticxs, incomodxs, con algún dolor físico, o incluso enfermedades, sin darnos cuenta que son señales que nos envía nuestro cuerpo para avisarnos de que hay algo que no está bien.
El equilibrio está en ti y está en tu mano devolverle a tu ser el bienestar que necesita.
Es fundamental también encontrar ese equilibrio para conseguir tus objetivos en la vida de una forma ecológica y sana para ti.
Cuando hay coherencia en nuestra vida creamos un entorno sano. El cuerpo y la mente trabajan de la mano. Se produce un balance físico, mental y emocional que nos empodera y que nos deja tranquilxs. La paz interior y el equilibrio se alcanzan cuando lo que uno piensa, siente, dice y hace están en armonía. Podemos incorporar hábitos en nuestro día a día para mantenernos en equilibro.
Mi propuesta es la siguiente..
HÁBITOS PARA MANTENER EL EQUILIBRIO
- Reserva cada dia como mínimo un momento para ti.
Marcatelo como prioridad. No puede ser que de los 1400 minutos que tiene el día no te dediques al menos 20 o 30 para ti. Utiliza este tiempo para lo que quieras que no sean obligaciones, redes sociales, ocuparte de los demás.. Utilízalos para conectar contigo: Medita, mira la puesta de sol, date un baño con sales... Busca aquello que necesites y que te dé paz interior.
- Cuida la calidad de tus pensamientos.
Cuida la calidad de tus pensamientos, porque de ellos dependen tus sentimientos y emociones, que impulsan tus acciones y omisiones, afectando tu bienestar integral y con ello la calidad total de tu vida.
Según diversos estudios tenemos alrededor de 60.000 pensamientos al día, y la gran mayoría son negativos. El 90% de ellos se repiten un día y otro día.. Para conseguir una mayor higiene mental toma conciencia de tu dialogo interno. Si éste es negativo notaras como en tu cuerpo hay incomodidad, tensión o alguna emoción desagradable. Seguidamente cuestiónate lo que estas pensando. Conviértelo en una pregunta.
Por ejemplo: " Todo me sale mal !" --> " ¿Realmente todo me sale mal?".
" No valgo para nada" --> " ¿ De verdad no valgo para nada?". El problema está en que nos creemos todo lo que pasa por nuestra mente.
Si logramos identificar estos pensamientos para analizarlos en frio, lograremos darnos cuenta de los ridículos que resultan en la mayoría de ocasiones; algo que se puede solucionar si aprendemos a analizarlos con lógica para comprobar que estamos llegando a conclusiones exageradas que nos provocan malestar.
Tus pensamientos constituyen tu vida, elígelos bien.
- Exprésate
Muchas veces reprimimos nuestras opiniones para ser aceptados o amados. Así nos anulamos a nosotrxs mismxs y empobrecemos nuestra autoestima.
Aprende a expresarte aún cuando no estes de acuerdo, de forma y elegante y natural. Líbera opiniones y emociones no expresadas. Hazlo con respeto y en un ambiente seguro y relajado.
Encontrar una vía de escape creativa y practicarla también es una forma de expresión. Baila, escribe, pinta... Haz aquello que te ayude a liberar esa energía emocional acumulada. No es necesario que tengas talento, el proceso de catarsis emocional es la autentica obra de arte.
- Mens sana in corpore sano
Una mente sana en un cuerpo sano y viceversa. La relación entre lo biológico y lo psicológico existe. Para tener la azotea en condiciones y una sana autoestima debemos prestar atención a nuestro cuerpo y cuidarlo. No hace falta tener un "cuerpazo" pero si cuidarnos y edificar un templo digno para nuestra existencia. El ejercicio regular y la dieta equilibrada van a influir positivamente en tu estado anímico, en tu salud física y en tu nivel de energía.
- Relaciones
Para mantener un entorno sano, lejos de malas vibraciones y respetarte es necesario que identifiques y reconozcas a las personas que te ayudan a crecer, y aquellas que no. Aparta de tu vida las relaciones tóxicas.
- Relaja-Respira-Medita
La relajación consiste en aprender a soltar la tensión de una manera consciente y ordenada. Ser capaz de liberar la rigidez de cada parte de tu cuerpo será el vehículo para conseguir alcanzar un estado de calma mental.
Respirar es mucho más que llevar el oxigeno a los pulmones. La inspiración oxigena cada célula de nuestro cuerpo. La respiración es nuestra primera fuente de energía: Aumenta nuestra vitalidad física, psíquica y espiritual y nos ayuda a restablecer el equilibrio emocional. Cuando te sientas bajo/a y tengas la necesidad de revitalizar tu energía a fin de poder mantener la actividad diaria, tómate un respiro y respira lento y profundo varias veces y notarás como te repones.
La meditación o el mindfullness no es despegar a otra dimensión, sino mas bien aterrizar. La meditación busca un tiempo más vivencial, más propio y más intimo.
Respira conscientemente, relájate y medita saliéndote de la cotidiana espiral vertiginosa. Al practicar estos hábitos y los anteriores estarás cultivando el equilibrio que deseas, y estarás tomando parte activa de tu salud y bienestar.
Pilar Ballester.
Gestalt-Coach